
junio 14, 2016

Revista Mentes Inquietas Vitoria-Gasteiz
Comentarios
Era el año 1960, cuando en mi joven mente se me quedaron bien
grabadas dos expresiones que aún no se me han borrado y siguen teniendo un gran
peso en mi pensamiento. Son de dos profesores distintos: Uno de ellos de Ética y Moral, quien dijo en una clase,
rotundamente: “Todo hombre es comprable. Hace falta saber por cuánto”. El otro, un profesor de Derecho, quien comentaba que con un
mismo artículo del Código Penal se puede condenar y se puede absolver. Depende
de la capacidad del defensor que uno tenga. Bien seguro que parecerán, y quizás sean, demasiado
exageradas.
0 comentarios:
Publicar un comentario